8 Consejos para Directores de Juego novatos

En la entrada anterior 6 Motivos para convertirse en Director de Juego traducida de Creighton Broadhurst, había una parte que hablaba de unos consejos anteriores para Directores de Juego novatos. Me ha parecido interesante traducir también ese artículo. Al igual que en las anteriores traducciones, el hecho de que lo haya traducido y compartido no significa que este al 100% de acuerdo, sino que me ha parecido lo suficiente interesante como para divulgarlo (y de paso añado otro titular clickbait en el blog):

Ser Director de juego (GM, de game master) es uno de los aspectos más gratificantes de los juegos de rol. También es uno de los más desalentadores, especialmente para los nuevos jugadores. Por suerte, es bastante fácil hacerlo bien.

By Matt Morrow

He estado jugando durante 30 años y en ese tiempo he visto a miles de jugadores ocupar su lugar por primera vez detrás de la pantalla. Recientemente, mi hijo menor me llevó a su primer dungeon. Las reglas, la lógica y la verosimilitud se dejaron de lado en la búsqueda de la diversión. La pasamos muy bien -incluso sobreviví- y eso me hizo pensar en consejos para los GM principiantes.

Si eres un GM principiante, considera lo siguiente cuando organices tu primer partida:

1.- Recuerde la Regla 0: Todos en tu mesa están allí (ojalá) para divertirse. Mientras todos se diviertan, el juego ha sido un éxito. Todo lo demás es irrelevante. Después de todo, ¿qué sentido tiene ejecutar un juego que sigue las reglas y el texto del módulo al pie de la letra, pero que nadie disfrutó? Eso no significa dar a los PJs un paseo fácil o inundarlos de tesoros (a menos que sea una trampa). Concéntrate en la diversión y todo lo demás llegará.

2.- Recuerde la Regla 1: En la mesa, seras el árbitro supremo sobre cómo se desarrolla el juego. Usa esta autoridad sabiamente, pero no tengas miedo de tomar decisiones y seguir adelante. ¡Siempre se puede volver a hablar de ello después de la partida en el pub con una cerveza!

3.- Hazlo Simple: Para tu primera partida, hágalo simple. Dirije una mazmorra fácil para personajes de bajo nivel – no intentes una partida de niveles altos o con una trama bizantina. Mantenlo lo más simple posible y concéntrate en lo básico. Lo básico es fundamental para el juego. Una vez que lo hayas dominado, podrás avanzar a aventuras más complejas.

4.- Acepta que te equivocarás: Recuerda que el mejor GM del mundo empezó sin saber casi nada sobre cómo dirigir una partida. Mientras tus errores no terminen con alguien perdiendo a su personaje o una pieza importante de equipo mágico, en última instancia no importa, siempre y cuando todos se estén divirtiendo (ver la regla 0 arriba).

5.- Prepárate: Estate lo más preparado posible para la partida. Si necesitas leer el módulo tres veces, hazlo. Tomar notas copiosas, buscar las reglas pertinentes, deletrear descripciones y así sucesivamente. Prepara cualquier ayuda de juego como mapas, figuras y cualquier otra cosa que necesites. Hacer todo eso antes del juego es mucho más fácil que hacerlo con tus amigos esperando.

6.- Delega: No necesitas hacerlo todo. Alguien más puede llevar la iniciativa, limpiar el mapa de la batalla y así sucesivamente. Deja que te ayuden para que puedas concentrarte en dirigir la partida.

7.- Si necesitas ayuda, pídela: Si te quedas atascado con un fallo o necesitas algún consejo sobre cómo manejar una situación, sólo tienes que preguntar. Puedes preguntar al grupo o hablar en privado con un jugador o GM con experiencia. Los juegos de rol son una experiencia cooperativa y tus amigos quieren que te diviertas, recuérdalo.

8.- Relájate: Relájate y disfruta del juego. Si estás estresado por dirigir la partida, no disfrutarás de la experiencia. Si no disfrutas de la experiencia, lo más probable es que tus jugadores tampoco lo hagan. Y lo que es más importante, no querrás dirigir otra partida, lo que es una lástima, ya que ser GM puede ser increíblemente gratificante.